¿Alguna vez has estado en una situación en la que querías ayudar a alguien tan mal que te sentías frustrado porque todo lo que has intentado no funciona? ¿O la persona parece no escuchar lo que estás diciendo? Muchas veces sentimos que hay algo más que deberíamos haber hecho, que podríamos estar haciendo o que no hicimos. Podemos encontrarnos dando vueltas en nuestros pensamientos y castigándonos a nosotros mismos porque no pudimos encontrar una respuesta.